¿Sobran turistas o faltan residentes?

puente de los puñetazos

En 1993, una comisión formada por el Consejo Internacional para la Protección de las Aves (ICBP), el Secretariado de la Convención de Bonn, la Sociedad Española de Ornitología, así como científicos y organizaciones ecologistas de toda Europa acordó en Arundel (Reino Unido) desarrollar una estrategia internacional para enfrentarse a la expansión del pato malvasía americano, desde el norte de África hasta Siberia, por la desigual competencia que éste ejercía durante al apareamiento sobre el pato malvasía autóctono. La comisión aconsejó «que se siga la experiencia española de eliminación a tiros» del invasor, y propuso que para ello se habilitasen cursos de entrenamiento. La referida ‘experiencia española’ se debió a que, años atrás, el territorio del pato malvasía autóctono se había saturado de patos malvasía americanos. Diversas organizaciones ecologistas exigieron entonces a la Junta de Andalucía medidas sin contemplaciones para reducir su población. Sigue leyendo