Paradores de Turismo recompensará a aquellos clientes que reserven de forma anticipada como una forma de revertir la tendencia que se ha generalizado de efectuar reservas a última hora. De momento lo hará en las especiales fechas navideñas, cuando es más crucial el asegurar que los establecimientos estén llenos. Y lo hará con una noche gratis por cada reserva anticipada de un paquete de Navidad o de Año Nuevo.
Esta iniciativa surge como consecuencia de la proliferación de reservas de última hora que está sufriendo los hoteles desde el comienzo de la crisis financiera mundial. Cada vez la gente reserva menos días y más en el último momento, se oye decir en casi todos los hoteles del país y en casi todas las agencias de viajes. Las causas apuntan no solo a las condiciones críticas de la economía, sino a hábitos adquiridos desde el instante en que Internet se ha convertido en el primer canal de venta de viajes y camas de hotel. Antes aún, desde que la informática hace su aparición en los sistemas de gestión del hotel, concretamente en el modelo del yield management, que ha primado en muchísimos casos la rebaja de última hora ante el riesgo de quedarse con las habitaciones vacías.
Otro factor a tener en cuenta es la propia idiosincrasia del viajero que diseña su viaje en Internet y reserva en varios hoteles a sabiendas de que las anularán a posteriori en busca del mejor precio. Alguno de los lectores de este Foro sostiene que el futuro reside en la introducción de un motor de reservas propio que termine con la dependencia de los hoteles frente a las centrales de reservas. Así, cada hotel podrá tener el control absoluto de sus precios. Sin embargo, no parece ésta una alternativa muy creíble, dado el aislamiento que sufriría el hotel en el mercado turístico y los daños colaterales que se derivarían del rechazo de una estrategia multicanal, hasta ahora la más rentable de todas.
Por descontado que los viajeros utilizan cada vez herramientas online más eficaces y una información más precisa sobre el hotel demandado. Se comparan precios y se cotejan opiniones a través de las distintas comunidades de viajeros y los meta-buscadores. Pero aquello que más ha contribuido a asentar la cultura de la reserva inminente ha sido la aplicación por parte de los hoteles de ofertas de última hora. Una política de rebajas que ha permitido a los viajeros encontrar la misma estancia a un precio inferior, sin gastos de cancelación o sin ningún pudor en la denegación de las penalizaciones en la tarjeta de crédito. A veces, incluso, mediante el truco de reservar otra habitación en el mismo hotel a un precio más económico.
[A fin de exponer en las jornadas hoteleras de Solares, el próximo 30 de noviembre, un argumento estadístico sobre este fenómeno, responde a esta encuesta solicitada en la columna derecha si eres hotelero: ¿Con cuánta anticipación se efectúan las reservas en tu hotel en términos medios?
Más o menos una semana / entre una semana y 15 días / un mes antes / más de tres meses]
Fernando Gallardo (@fgallardo)
Vives en la nube. Huyes del suelo a tus pies. Vas a despegar y sabes que luego ya nada volverá a ser igual. Descorres las cortinas, adaptas el iris a la intensidad del reflejo, tuerces el gesto. ¿Qué te detiene? Todo muda a tu alrededor, como en una agradable fantasía.