La Organización Mundial del Turismo (UNWTO, en sus siglas en inglés) acaba de lanzar una herramienta que ayuda a los hoteles a su autoevaluación energética y propone medidas de sostenibilidad medioambiental tendentes a rebajar su consumo a niveles de cero o casi cero. El sector turístico se suma así a las preocupaciones de los gobiernos y sociedad civil por el cambio climático.
Financiado por la Unión Europea, el programa neZEH (nearly-Zero Energy Hotels) evalúa la eficiencia energética de los establecimientos hoteleros a través de un cuestionario y selecciona las mejores opciones de ahorro energético, que incluyen una mejora en el uso de fuentes no renovables y una aplicación didáctica dirigida a incrementar la conciencia sobre el tema a través de casos específicos. Todos los alojamientos turísticos en los Estados miembros de la UE estarán obligados a cumplir con estos patrones a partir de 2020. Esto es, deberán ser edificios nZEB (nearly-Zero Energy Building o edificio casi cero en consumo energético), cuya sostenibilidad estaría garantizada por un bajo consumo energético procedente de fuentes de renovables, incluidas las producidas in situ o en sus cercanías. Sigue leyendo