Ayer leí el enunciado de un debate en LinkedIn con el siguiente arranque: «Me he unido a este grupo porque me ronda hace mucho tiempo el crear un hotel con encanto… ¿Es una idea disparatada?» Lo firmaba Rebeca Almeida, experta en temas de calidad ambiental, imagino que entusiasmada por el sueño de regentar un lugar que fuera ejemplo de aquello en lo que posee experiencia. El debate, hoy desaparecido misteriosamente del grupo de Hoteles con Encanto en esa red social, estuvo animado durante unas semanas en las que se pudieron leer diversos comentarios (más a favor que en contra) sobre esta importante cuestión. ¿Es el momento de invertir en hoteles pequeños de interior o no?
Tras varias sesiones mordiéndome los labios, no he podido resistirme a la tentación de contestarle en los términos que siguen. Y que espero no hayan causado desánimo en la emprendedora en potencia de un hotel rural.
Hola, Rebeca. Si quieres mi opinión, dado que en el fondo de la cuestión me siento responsable de haber embarcado con mis guías a miles de hoteles rurales que hoy yacen dolientes por la geografía española, creo que la pregunta que deberías hacerte no es esa. ¿Es una idea disparatada? Nadie lo sabe. Solo tú misma lo puedes Sigue leyendo


Caliente! Así sale este año la guía de Hoteles con Encanto que publica EL PAÍS-Aguilar hacia las librerías y cuya portada ilustra este artículo… Caliente de amistad, de de aroma viajero, de renovada hospitalidad. En estos tiempos inciertos para la industria editorial, la guía de toda la vida nos reúne de nuevo en torno a un anaquel, con un libro de papel entre las manos, con un sueño de hotel destino en sí mismo. Así es nuestra guía, así son los hoteles más recomendables de España para un fin de semana romántico o unos días de gozo asueto en el campo. Con una portada que vuelve al sabor de los viejos tiempos, eso que ahora se tilda de estilo vintage, resultado de las votaciones de los lectores bajo el filtro connoisseur de quien escribe esto.