Recordamos hace ocho meses en este Foro que el acceso sin cortapisas a Internet era condición, más que prebenda, de un hotel que hoy pretenda subsistir en este mundo tan intercomunicado y competitivo. Lanzamos una lista con 900 establecimientos turísticos en España y Portugal que ofrecían wifi gratis en sus habitaciones con la esperanza de que otros se sumasen a la iniciativa y liberasen el acceso inalámbrico para no complicarle más la vida a sus huéspedes. Muchos, grandes y pequeños, pensarían entonces que Internet, como el teléfono, era un comodity que había que cobrar. Nada más errado que eso, señores hoteleros del siglo XX. Internet ha devenido una utilidad más cercana al agua o al suministro eléctrico que al teléfono. Costos que deben figurar en la cuenta de explotación, pero no en la factura del cliente. No por nada, sino por costumbre, por cultura de uso… porque siempre nos parecerá ridículo, aunque justo, que se le cobre a un pasajero de un vuelo low cost el pis que deposita en el excusado del avión. Convengan conmigo, señores, que un pis no puede acreditar la misma categorización que un frasco de Hermès en el duty free de abordo.
Recordamos hace ocho meses que el libre acceso a un Internet móvil era condición de la sociedad del conocimiento en que, pese a las reticencias de los menos ilustrados, estamos entrando todos ya. Desde entonces ha llovido algo (no tanto) y se ha desencadenado por este medio la insurgencia generalizada de los países islámicos sumidos en su caverna medieval. Túnez, Egipto, Bahrein, Libia… Es la revolución digital, el grito de los individuos a través de Twitter que solo se hacen masa en los nodos de los operadores de telecomunicaciones y que, a diferencia de sus padres, se concentran pacíficamente en la calle Facebook.

Pues bien, de ocho meses a esta parte, más de 100 establecimientos hoteleros en España y Portugal han comprendido que cobrar aparte por la wifi, interrumpir el acceso con extraños y complejos códigos, o deservir el uso que todos hacemos ya de ordenadores o gadgets digitales en nuestra habitación de hotel es tal que prohibirle a un cliente la entrada en el hotel. Puede que mañana todos viajemos con dispositivos móviles 3G, 4G o 5G y no necesitemos la wifi para nada. Pero, mientras tanto, habrá que proveer del servicio que los viajeros de hoy demandan. Y, por ello, más de 100 hoteles hasta un total de 1.105 (por el momento) se han sumado a esta iniciativa que hemos propuesto y han habilitado los medios oportunos para que la señal wifi llegue clara y rápida a todas sus habitaciones, sin cargos adicionales en la cuenta de sus clientes.

A título informativo, hemos abierto dentro del Foro de la Ruina Habitada esta página: Hoteles con Wifi Gratis (www.hotelesconwifigratis.com). A través de ella podemos mantenernos informado de qué hoteles ofrecen este servicio gratuito en sus habitaciones. Cualquiera puede añadir hoteles a la lista y comentarios al respecto. Así iremos confeccionando entre todos «el Forbes de los hoteles digitales».

De igual modo, el Foro de la Ruina Habitada ha abierto otra página en Facebook (Hoteles con Wifi Gratis) en la que, además de lo anterior, viajeros y hoteleros pueden dialogar sobre la utilidad de este servicio y las condiciones en que se presta durante la estancia turística.

Lo que deben comprender quienes no han implementado aún este servicio es que, más que una ventaja competitiva, lo que logran quienes ofrecen wifi gratuita en sus habitaciones es «estar en la pomada», ser conocidos y reconocidos por sus servicios y, en definitiva, pasar el corte que los viajeros digitales establecen entre los hoteles recomendables y los no recomendables.

Yo, si fuera hotelero, no me haría el Gadafi (con todos los respetos y a sabiendas de que huelga toda comparación entre una y otra forma de conservadurismo).

Fernando Gallardo |